La región del Golfo de California en la Delegación de la Ribera es uno de los sitios con mayor riqueza marina de México y del planeta. El parque nacional de Cabo Pulmo cuenta con un arrecife vivo y pletórico de vida marina con 20,000 años, siendo uno de los más antiguos del Pacífico americano. Por su importancia y alta diversidad marina esta zona ha sido declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO, sitio RAMSAR y Área Natural Protegida.

Desde tiempos remotos ha sido habitada por exploradores y navegantes del Golfo de California. Uno de los hallazgos arqueológicos más relevantes es el realizado a mediados del siglo pasado por el arqueólogo norteamericano, William H. Massey, en cuevas cercanas a la costa, quien encontró fardos de hoja de palma con huesos humanos pintados de ocre y sin relación anatómica aparente. A estos trabajos arqueológicos se les denomina Tradición Funeraria o Cultura de Las Palmas. Estos hallazgos son del periodo de 1200 a 1700 d.C. y probablemente están relacionados con los indígenas Pericúes, —etnia que tuvo contacto con los navegantes europeos en el siglo XVI —.

Dentro del proyecto colonizador jesuita se contemplaba establecer una misión en la región más austral de la península para el auxilio del Galeón de Manila y el primer paso para conseguirlo sería la fundación de la Misión de Santiago de Los Coras. Con este motivo, el 17 agosto de 1721, salieron de la Misión de La Paz los Jesuitas Ignacio María Napoli y Jaime Bravo en una travesía terrestre acompañados de una comitiva de soldados e indios Guaycuras comandada por el capitán, Esteban Rodríguez Lorenzo, arribando el día 25 de ese mismo mes a Bahía de Las Palmas, ubicada en la actual Delegación de La Ribera